SANTUARIO DE LA VIRGEN DE LA MONTAÑA (1961)

Foco de fe y de devoción popular el Santuario de la Virgen de la Montaña se conforma como uno de los puntos de referencia y más emblemáticos en el Cáceres de Ayer, de Hoy, de Mañana. De siempre.
 
santuariodelavirgendelamontaña1961Y allí la Virgen, siempre, también, escuchando y recogiendo plegarias que salen de lo más hondo del alma, oraciones que nacen en la verdad del corazón, preces que buscan su cobijo en la esperanza en la Virgen, reflexiones de las gentes que la adoran. Ayer, Hoy, Mañana, Siempre.
 
El bisbiseo de unos, la reflexión de otros, la mirada quieta, fija, o temblorosa, esperanzadora siempre, a veces palpitante y acuosa de una acuarela configurada de unas laminillas transparentes de lágrimas que salen del interior de los devotos que hasta allí, a lo alto del Santuario, acuden en búsqueda del consuelo, de la paz, del amor… 
 
Allí, en el santuario, todo un manantial devocional, de luz y de sortilegio, como un ramo de flores eternas a los pies de la Virgen de la Montaña, ahí es nada, se escucha el silencio del recogimiento ante la Patrona de Cáceres. Y que se adorna, claro es, con sus manos tendidas, con la inmensidad del mensaje de la fe para todos, con la templanza que emana de su intermediación, con el corazón abierto, con la mirada que rezuma amor, con el gesto dulce, sereno, suave. Se diría que de entendimiento y, también, de comprensión… Más allá, ¿por qué no?, el alma cacereña.
 
Santuario bendito donde se cobija el armazón de una larga historia que todos los cacereños aprendemos de nuestros padres, de nuestros abuelos, de nuestros profesores, de nuestros amigos y compañeros. Y hasta allí, siempre, claro, vamos con el zurrón repleto de las aguas que conforman el riachuelo de las inquietudes, de las angustias, de las problemáticas que a todos nos conmueven, de las necesidades espirituales y devocionales que llaman a nuestra puerta…
 
Y allí, siempre, el santuario de la Virgen de la Montaña con las puertas abiertas de par en par para dejar ante Ella, la más guapa, como se la conoce de siempre, todo un puñado de peticiones, de ruegos, de anhelos…
 
NOTA: La fotografía es del año 1961.
 
 

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