FOTOGRAFÍA PRADO, DE AFUERAS DE SAN ANTÓN A CORTES, LUEGO MORET

Cáceres, ya lo hemos dicho, siempre dio fotógrafos de señalada calidad para las páginas de su historia. Llegados de fuera o nacidos en Cáceres. Y aquí van unos nombres de oro: François Capdevielle, Vicente Fonseca, Hermanos Carpintero, Javier, Garrorena, Julián Perate…

Ya en aquellos tiempos de finales del siglo XIX, que se dice pronto, C. Prado se suma a ese movimiento de inquietudes artísticas al aire de la llegada de las nuevas tecnologías, en lo que llegaban a reconocerse los retos de los estertores de aquel siglo.

Inquieto y estudioso de las mismas tecnologías artísticas, apasionado de su hipotética influencia en el panorama del avance social, conocedor del trabajo de sus colegas cacereño en el arte y en el marco, y también de la competencia en el panorama fotográfico, C. Prado decide embarcarse en ese rumbo que ya marcaba el panorama fotográfico.

Y, ni corto ni perezoso, se puso manos a la obra. Había que trabajar y esmerarse en las posibilidades y en las tipologías que pudieran emanar de ese nuevo campo que se iba incrustando en la sociedad: La fotografía.

Por ese motivo un buen día C. Prado, que estaría llamado a altos empeños en el panorama fotográfico cacereño, decide la aventura de abrir una tienda o establecimiento en la calle que, ya en aquellos tiempos, comenzó a llamarse como Afueras de San Antón, que es por donde venía a finalizar la calle San Pedro, y por ende, prácticamente la ciudad. Si bien a esas alturas Cáceres ya comenzaba, paulatinamente, a pegar el estirón Paseo de Cánovas arriba.

De tal modo es así que, acorde con las tendencias de dejar constancia de la dirección de la casa, podemos leer en el testimonio fotográfico que la tienda o el establecimiento fotográfico de C. Prado se encuentra instalado en la calle conocida como Afueras de San Antón.

Estamos hablando, pues, de finales del siglo XIX, que es la fecha de la fotografía.

Y poco después, combinando su propia filosofía artística con los pasos y la influencia que comenzaban a marcar, también, los periódicos de Cáceres, C. Prado apuesta, para lanzar al máximo el prestigio de su nombre y la marca de su establecimiento, así como las características de sus avances, por anunciarse en los periódicos.

fotografiaprado.elnoticiero1junio1903Como es el caso de este anuncio que aparece en el diario cacereño «El Noticiero«, fechado el 29 de mayo de 1903, y en el que, tal como se puede leer C. Prado, Fotografía Madrileña, destaca que es la «Unica casa especial en Cáceres, con todos los adelantos hasta hoy conocidos», lo que ponía, claro es, a disposiciónde sus visitantes y clientela.

Y, dentro de ese campo, destaca «Reproducciones, ampliaciones hasta el tamaño natural» (que ignoramos para que se querrían tamañas estampaciones en los domicilios familiares) para finalizar con un nombre pegadizo: GALERÍA MODELO y que, a buen seguro, imaginamos, andaría corriendo de boca en boca por, como se suele decir, el todo Cáceres.

Aunque, eso sí, haciendo o tratando de hacer la competencia a colegas del relieve de los que se enmarcaban en aquel Cáceres de bellas historias en el día a día y en el camino y el recorrido de los avatares y aconteceres diarios.

Más un buen día C. Prado piensa que la dinámica comercial y humana, de la vida cacereña, trasegaba, sobre todo, y fundamentalmente, por los aledaños de la Plaza Mayor y de la calle Pintores. Por lo que decide instalarse, entonces, aún en los inicios del pasado siglo XX, en la calle que los cacereños conocían como Cortes. Un lugar privilegiado y de gran tránsito que, con el tiempo, pasaría a denominarse Moret.

La antigua calle Cortes en el Cáceres que pareciera perderse en la noche de los tiempos, abrazada a la calle Pintores, la más céntrica y comercial de Cáceres, y a la vera misma de la Plaza Mayor, y desembocando o, mejor dicho, arrancando en la Plaza de la Concepción, también se convirtió en un foco de paso, tránsito  y paseo ciudadano de los cacereños y cacereñas.

Un motivo por el que se fue expandiendo, a pesar de sus reducidas dimensiones.. Y en ese expansionismo, claro es, se iba instaurando, al tiempo, una dinámica comercial y empresarial que cuajando de vida, de importancia y de transcendencia a la esta tan bien calle popular cacereña y marcando, de siempre, su ritmo en su ubicación en uno de los ejes viarios más señeros del centro de Cáceres.

Y hasta allá, aquella vieja y cacereñeadora calle Cortes, que se fueron instalando paulatinamente, en el transcurso del tiempo, tipos emprendedores, en base de un esfuerzo, sacrificio y un gran anhelo.

Lo que siempre es menester para la marcha del tren de la sociedad.

FOTOGRAFIA pRADO.
Anuncio sobre Fotografía madrileña, publicado en 1904, en el periódico «Malvas y Ortigas».

Entre esos emprendedores, figuraba un siempre inquieto y popular artista fotográfico como fue C. Prado.

Y que le dio y posibilitó a su tienda o establecimiento comercial un prestigio del que el mismo hacía gala a pesar de la alta y severa y cualificada competencia que tenía en sus aledaños y en todo Cáceres.

Inclusive el mismo llegó a anunciarse en el periódico cacereño «Malvas y Ortigas«, allá por el año 1904, del siguiente tenor:

La céntrica calle cacereña, siempre llena de vida, se llamaba en sus buenos tiempos, como se suele decir coloquialmente, Cortes.

Hasta que un día Segismundo Moret, 1838-1907, destacado político que llegó a alcanzar las responsabilidades de Ministro de Ultramar, de Hacienda, de Gobernación, de Estado, de Fomento, presidente del Congreso de los Diputados y presidente del Consejo de Ministros, apareció, con su carpeta de proyectos, por Cáceres.

Por aquellos tiempos la calle Moret se llamaba Cortes. Pero don Segismundo Moret, político liberal y monárquico, que está calificado como de adelantado en el fomento, entre otras, de las reformas sociales, y percatándose de la importancia del descubrimiento de las minas de Aldea Moret, en 1864, viajó en numerosas ocasiones a Cáceres. sobre todo entre 1874 y 1871, y defendió la riqueza minera del Calerizo, imprimiendo un gran desarrollo en la zona.

Tanto batalló por el tren que participó en la Sociedad General de Fosfatos de Cáceres así como en la Sociedad de los Ferrocarriles de Cáceres a Malpartida de Plasencia y a la frontera portuguesa.

También fue el artífice de la puesta en marcha del Tren Internacional Madrid-Lisboa, en 1881, con la presencia en Cáceres de los Reyes de España y Portugal.

Ante sus esfuerzos y logros en 1880 el Ayuntamiento de Cáceres le dio su nombre al entonces barrio minero, que pasaría a denominarse Aldea Moret, le nombró Hijo Adoptivo en 1881 y en 1913 el pleno municipal decidió poner su nombre a una de las calles más importantes de Cáceres. La hasta entonces denominada Cortes.

En aquella calle Cortes, ya en aquellos tiempos, antes de que la misma pasara a denominarse Moret, una figura emblemática en la vida social y económica de Cáceres, gracias a sus gestiones e influencia, tenía su taller fotográfico Prado, tal como figura en las dos fotografías a caballo entre el blanco y el negro y el sepia.

Un cacereño más, el amigo, paisano y fotógrafo Prado, que se sumó, con señalado esmero, a la batalla de la evolución que se libraba alrededor del panorama de la fotografía. Acaso, como un símbolo del rumbo que marcaban y diseñaban los rumbos de la vida. Y allá que se fue nuestro hombre, Prado, y atrevióse y embarcóse en ese panorama de las instantáneas fotográficas e inmortalizar secuencias, escenas, personajes, familias, dinastías, celebraciones y otros aconteceres de la ciudad…

Un tipo, Prado, de iniciativas emprendedoras. Consciente, acaso, de que ya comenzaban a imponerse eso que llamaban nuevas tecnologías y que, poco a poco, comenzarían  a ir marcando los nuevos tiempos combatiendo, desde la trinchera de la competencia y de la competitividad, de aquellas verdaderas figuras de la fotografía que ya marcaban sus criterios y posiciones en el Cáceres, ay, de aquellos tiempos.

Fotografías, como se puede apreciar, con artisticos diseños creativos con los que lograba dejar patente su impronta artística. Y que hoy, tantos años después, figura, por derecho propio, en las páginas de historia de Cáceres.

Licencia Creative Commons
FOTOGRAFÍA PRADO, DE AFUERAS DE SAN ANTÓN A CORTES, LUEGO MORET por JUAN DE LA CRUZ GUTIÉRREZ GÓMEZ se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial 4.0 Internacional.

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