PEPI SUAREZ Y DANIEL (COROS Y DANZAS DE LA SECCION FEMENINA. Principios 60)

El folklore cacereño, las jotas y danzas de la provincia, se conforman de un especial tipismo, belleza y sensibilidad. Algo que llevamos muy a gala todos los cacereños y cacereñas.

 

corosydanzascaceres1La recuperación de la riqueza de las canciones y danzas de la provincia de Cáceres, a través del tiempo, firmemente arraigadas en la hondura de las tradiciones populares y costumbristas de la Alta Extremadura, fue un logro de un relieve de muy señalados considerandos. Gracias, evidentemente,  al trabajo y la labor desarrollada por una serie de eminentes folkloristas.

Lo que es de justicia reconocer para la mayor y mejor configuración de las páginas de la historia de Cáceres en su recorrido por el sendero, sencillamente, del tiempo. Al menos desde nuestro modesto punto de vista y de consideración.

corosydanzaskLo que se fue llevando a cabo en su día, través de un campo del más profundo relieve, por musicólogos e investigadores de la talla de Manuel García Matos, Angelita Capdevielle, Bonifacio Gil García, Valeriano Gutiérrez Macías, Domingo Sánchez Loro… Todo ello a lo largo de esos estudios, investigaciones, grabaciones, apuntes, anotaciones, entrevistas, para ir captando el origen de las mismas, las letrillas, las coplas, la indumentaria, los pasos de las danzas, los instrumentos musicales, gaitas o flautas, tamboriles, bandurrias, guitarras, laudes, panderos, botellas, castañuelas…

Labor que siguió adelante, con el respeto a la pureza y el compromiso de su divulgación, gracias a las agrupaciones folklóricas de Coros y Danzas de la Sección Femenina, que dirigieran en su día la propia Angelita Capdevielle y Pepi Suárez, los Coros y Danzas de Educación y Descanso, a cuyo frente estuvo Rafi Curiel, y otras posteriores asociaciones folklóricas esparcidas por toda la provincia.

corosydanzasgComo es el destacado caso, por ejemplo, de la Asociación Cacereña de Folklore «El Redoble», gracias al ahínco de María Fernanda Sánchez Franco, fundadora-presidenta de dicha agrupación, y el trabajo, intenso, de tantos cacereños a lo largo del tiempo. Una Asociación que conserva en la vitrina de su alma y de los reconocimientos y triunfos ni más ni menos que la Medalla de Extremadura con la que fue merecidamente galardonada en su día por el Gobierno regional.

Toda una belleza, la de las canciones y danzas típicas de Cáceres, que se ha ido conservando con una pristina pureza y raigambre que es digna de destacar y dejar constancia en estas líneas que nacen al hilo de una preciosa colección de fotografías como son las que se acompañan en este texto.

corosydanzascaceres2Y allá que, en base al esfuerzo más considerable y una labor de extraordinaria dedicación, se comenzaron a ensayar una y otra y otra vez aquellas danzas que habían ido recogiendo, de forma tan paciente como esmerada, los investigadores,

çComo «Los Sones de Montehermoso«, «La Jerteña«, «El Riani si si sí«, «El Arbolito«, «El Perantón«, «La Jota de Alcuescar«, «La Jota de Guadalupe«, «La Jota Cuadrada«, «El Redoble«, «El Cerandeo«, «El Quita y Pon«, «El Pollo«, «El Pindongo«, «La Carta«, con esa letrilla que dice:

Me escribiste una carta,

con una rayita verde,

no quiero carta ni raya,
quiero que vengas a verme…
O «La Rondeña«, con letrillas como:
Unos ojos negros vi
al entrar en Villanueva,
unos ojos negros vi,
me miraron, se rieron,
y tras ellos yo me fui
al entrar en Villanueva.

Canciones y danzas que, desde su misma recuperación y recopilación, ya iban siendo divulgadas por los escenarios cacereños, regionales, nacionales, europeos y de todo el mundo a través de las diferentes embajadas folklóricas por parte de diversas agrupaciones de Coros y Danzas de Cáceres.

Fue al principio de los años 60 cuando un fotógrafo de gran prestigio nacional, Joaquín del Palacio (1905-1989), que popularizó el seudónimo de Kindel, recorrió toda España inmortalizando, con cientos de instantáneas, una parte de las danzas de los pueblos y las gentes de las más diversos lugares.

Como estas cuatro fotografías que podemos apreciar con la pareja formada por Pepi Suárez, que fuera directora de los Coros y Danzas de la Sección Femenina, y Daniel, dos cacereños de pura cepa, enamorados apasionadamente del folklore cacereño. Tal cual como lo hicieron, lo hacen y continuarán haciendo miles de cacereños y de cacereñas que sienten, en lo más hondo de sus adentros, las esencias del folklore popular de la provincia.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.