En el Palacio Real de Madrid, uno de los más grandes del mundo, existe una dependencia conocida como PUERTA DE LA ESCALERA CACERES. Un fenómeno que llamó nuestra curiosidad. «CACERES EN EL PALACIO REAL DE MADRID», es el título de mi artículo que hoy, 18 de marzo de 2022, aparece publicado en el diario regional extremeño «HOY».
En algunas ocasiones sucede que uno se asombra de algunas curiosidades novedades que pudiera alcanzar, en base a sus trabajos. Lo que no resulta baladí.
El Palacio Real de Madrid, edificio emblemático donde los haya, cuenta con una larga serie de nombres que se adornan por sus escaleras, puertas y otras estancias en su majestuosa y relevante alzada. Una forma, consideramos que significativa, para identificar todos los rincones y espacios con que cuenta el Palacio, tan madrileño como español. Nombres, todos ellos, los de los salones, despachos, puertas y escaleras que permanecen en la historia.
De este modo llegamos al nombre conocido como la Puerta de la Escalera Cáceres, con que se distingue una parte del Palacio Real, tal como se puede apreciar en el pie de la ilustración. Un grabado que data, ni más ni menos que del año 1878, y que se ofrece a los lectores con motivo del fallecimiento de Su Majestad la Reina María de las Mercedes de Orleans, en una de las más prestigiosas revistas de la época, de alcance internacional.
La Puerta de la Escalera de Cáceres se convertía, según las referencias especificadas, en uno de los lugares de acceso y espera del pueblo madrileño que se aglutinaba en largas colas en el Palacio para despedir a la Reina y decirle adiós a través de la imagen regia en el féretro y expuesta a los efectos oportunos en la capilla ardiente instalada en el Salón de Columnas, de señalados acontecimientos en la historia de España, y que también fuera en su día Salón de Bailes y Banquetes.
Una luctuosa y preciosa estampa de manifiesto calado costumbrista, acorde con los tiempos, de hace ya ciento cuarenta y cuatro años, tal como se puede apreciar en el aire de tan preciada ilustración, obra de Daniel Perea y tomada expresamente del natural.
Una forma de descubrir la presencia del nombre de Cáceres en las estancias del Palacio Real de Madrid.
NOTA: El pie de la fotografía reza así: «Entrada del público en el Palacio Real por la puerta de la escalera de Cáceres, para visitar el cadáver de S.M. la Reina».
Si somos más grandes de lo que podamos imaginar,…Loor y vítores!